martes, 28 de diciembre de 2021

Los sentimientos, los hechos y la Fe.

 En la vida todos tenemos nuestra forma de ser y de actuar, unos más locos que otros.

 Quien solo dedica tiempo para trabajar, exigir y criticar, nunca tendrá comunión consigo mismo, mucho menos con Dios.

Con el paso del tiempo nos vemos cada vez más usados y abusados por el mundo y sus demonios, hasta matar nuestros sueños con tal de no perseverar en alcanzarlos. ​

 Muchos nos quejamos por falta de tiempo para todo lo que hay por hacer, el asunto es que, nuestras luchas adolecen de espiritualidad, por lo que, no crecemos en fe; así es como el enemigo nos derrota.

 Por tal razón, si queremos fe, no solo tenemos que comenzar, sino terminar nuestros proyectos. Todos los seres humanos vivimos dificultades en cada área de la vida, ya sea en lo económico, en la salud, con el matrimonio, con la soltería, con la vejez y hasta con la juventud.

 Necesitamos una relación personal y sincera con nosotros mismos, con otras personas y con Dios; si en verdad queremos llegar a una vida plena y feliz

 Nuestros conceptos y pensamientos, lo que decimos tanto como lo que hacemos, y lo que dejamos de hacer en el caminar por esta vida, es lo que nos aleja o nos acerca a la victoria.

 Por tanto, nadie será justificado por hacer simplemente lo que le toca, necesitamos tomar conciencia de lo que es pecado, o lo que nos aleja de Dios; y qué nos impide ver manifiesta su justicia, pues la ley no nos justifica, al contrario, nos condena.

 En su paciencia, Dios había pasado por alto los pecados; pero en el tiempo presente ha ofrecido a Jesucristo para manifestar su justicia. De este modo Dios es justo y, a la vez, el que justifica a los que tienen fe en Jesucristo.

 Nuestra fe en jesucristo hace que la palabra de Dios se haga vida en nosotros.

 La experiencia de Dios se basa en pensar en El, y elevar un par de frases u oraciones al cielo y sentarnos a esperar a que se hagan realidad, pero Dios se hace real con la experiencia.

 La fe nos lleva a creerle a Dios a pesar de las circunstancias, y a poner en práctica su palabra. Abraham y su esposa, Sara, estaban muy viejos, Dios les prometió que tendrían un hijo, Abraham creyó a Dios. Luego de 25 años, la promesa de Dios se cumplió.

 La fe y la obediencia van de la mano, porque cuando uno cree en algo, actúa, de lo contrario, no se notaría la fe. La fe crece en la medida que conocemos a Dios y obedecemos su palabra. Lo escucho o lo leo, lo creo y lo aplicó, así crece la fe en mí.

 Los sentimientos y emociones siempre están cambiando conforme nuestro actuar en relación con las personas, porque, “No sabes cómo va a rebotar la pelota”.

 Por tal razón no debemos basar nuestra fe en sentimientos, pues ellos estarán rebotando conforme esté el terreno por donde caminamos. Cuando estamos esperando sensaciones como destellos de luces y colores para creer, significa que nuestra fe se basa en sentimientos, mas no en la palabra de Dios.

 Nuestros sentimientos son capaces de afectar nuestros hechos, porque conforme estemos de ánimo, así actuaremos. Los sentimientos tienen su lugar, vienen después de los hechos y de la fe.

 ¿Qué hacer cuando estemos desanimados?

Santiago 5:13-15.      ¿Está alguno entre vosotros afligido? Haga oración.

¿Está alguno alegre? Cante alabanzas.

 ¿Está alguno enfermo entre vosotros?

 La Palabra de Dios traerá sobre el alma del creyente una respuesta conforme a la fe.

Un cristiano no se preocupa por sus sentimientos, simplemente los entrega a Dios y descansa en su amor y bondad, y El traerá paz al corazón.

 

El creer otorga tranquilidad mental, gran parte de los sujetos se pueden sentir conformes siempre y cuando no tengan preocupaciones, por lo cual al eliminar las incertidumbres y creer que “todo sucede por alguna razón”, se deja de buscar la verdad. Aquellos verdaderamente inquietos no se conforman con lo incomprobable y buscan la verdad por todos los medios.

 

Por otro lado, resulta imposible conocer si realmente la razón y la búsqueda constante de lo fidedigno ayuda a llegar a la verdad.

 

La creencia se confunde a menudo con la fe, “El sufrimiento es un paso obligado” Cada creencia está acompañada de temores.

 

La fe se vive en el espíritu, no en la mente. Cuando Dios nos motiva perdemos el miedo.

La fe amenaza a los incrédulos, es peligrosa para las masas, porque las despoja de sus creencias. La fe es interior, es íntima, es auténtica e inquebrantable, es seguridad, es amor.

 Vivir por fe es vivir en experiencia de Dios. Cuando se está arraigado en la verdad, nada te puede sacudir.  

 La fe de muchos cristianos no se basa en Dios, sino en sus propias percepciones.

 La fe es decir "sí" a Dios, es el acto de confiar libremente. Sólo es posible creer por la gracia de Dios.

                                             Jesucristo te ama y te bendice

 

JoseFercho ZamPer

 

lunes, 8 de noviembre de 2021

Dormido o despierto contigo sueño.

 Ahora que estoy aquí en casa

Me siento un rato a descansar

de repente escucho una voz

como queriéndome conversar


¿Qué nada quieres tu conmigo?

Me preguntas una vez mas

Por precio justo tendrás respuesta

conocerás así la verdad.


Estoy aquí para discutir este asunto

Para oír lo que quieres hablar

Ganarme así hoy tu confianza

Tus inquietudes quiero escuchar


Dime Jesús qué es lo que siento

Cuando a la gente suelo tratar

Pues solo hablan de dinero

Y del asunto de trabajar

como obrero del universo

resultados te quiero dar


Muchos que creen saberlo todo

Ni idea tienen de dónde están

Tu eres el hijo del Dios eterno

no estás dispuesto a negociar


La vida apesta para estas personas

y nada serio contigo quieren

Porque se obligan a ser mejores

Y se les daña su caminar


Hay muchas cosas que no comprendo

Cuando me siento a meditar

Si miro de frente al universo

Se estremece hasta mi pensar


Gracias por venir a escuchar mi queja

Es realmente algo muy genial

Saber que atiendes a los creyentes

gracias al padre yo quiero dar


Tú, el creador del cielo y la tierra

Me has buscado por mucho tiempo

Porque perdido solía estar

Con tu abrazo de amor eterno

Mi vida vino a rescatar.


¿Cómo saber lo que me conviene?

Si no comparto con los demas

Si yo no voy a donde tú me quieres

¿Cómo sabré, que es la verdad?


Buscándote he estado por mil lugares

Desde la mañana hasta el anochecer

Como la gente no te conoce

Razón de ti no me supieron dar


Vivo en una finca en las afueras

en una búsqueda espiritual,

tratando de hallar alguna respuesta

que me anime a continuar

No quiero ir a ningún otro lado

Solo contigo yo quiero estar.

Porque, hay mucho de qué hablar.


JoseFercho ZamPer


 

lunes, 1 de noviembre de 2021

¿Quién es Dios para ti?



 Crecí en un hogar muy católico y religioso, tocaba cumplir con un resto de ritos y tareas para satisfacer en algo a mis padres, y esto en todas las áreas de la vida diaria; tales como, oficios, tareas, estudios, rezos y más mandatos religiosos.

 Yo fui católico como hasta los 15 años, cuando fui adquiriendo conciencia cristiana y empecé a no creer tantas historietas mitológicas, empecé a orar y a buscar a Jesucristo en una forma individual y solitaria. Luego de varios años me fui enfocando en alguna iglesia protestante, y así ando aun, sin ser fiel a una iglesia como tal, pero si a Jesucristo, aunque me congrego y ayudo a las labores de enseñanza y orientación.

 No es solo lo que aprendimos en la escuela como formación religiosa, se trata de conocer al Padre, eso es, no más; pero la única manera es conociendo a Jesucristo.

 Podrás confesarte todos los sábados, e ir a misa los domingos y comulgar, o al culto de su iglesia y hacer todo lo que allí te manden; pero, si NO conoces a Jesucristo, PAILAS.

 Muchas veces lo mejor que hacemos es criticar y hablar mal de lo que otros hacen o dicen, pero al mirar la familia, podemos decir; no me suena, no me suena.

 ¿Cuál es nuestra formación en la fe? Pegunto… Me imagino que tú también.

 Recuerdo los días de enfrentamientos con mis maestros de religión y biblia, tanto en la escuela como en la iglesia. Las razones, los temas de la fe versus los ritos y toda esa mitología que manejan acerca de las cosas de Dios; cosas que la Biblia no dice.

 ¿Qué es lo que me quieres decir? Ha sido mi pregunta favorita.

 Cuando no hay respuestas a las preguntas, ¿Qué hacer?

Me he visto obligado a creer en la palabra de Dios, y dejar de lado todo eso que dicen otros y que no me llega al alma.

 Durante muchos años sentí un vacío en mi alma, era todo un hoyo o hueco que me succionaba a la nada, toda una necesidad de algo que me saciara o llenara ese vacío.

 Mi alma necesita a alguien que le dé sentido a mi vida, alguien a quién hablarle cuando estoy desesperado, que atienda mis quejas cuando estoy a reventar de mundo, de carne; igual que cuando como mucho y se me hincha el estómago, ahí es cuando necesito un tinto o café para regular mi digestión, de lo contrario estaré pesado todo el tiempo, y sintiéndome mal.

 Conforme el tiempo pasa, mi experiencia espiritual ha ido en aumento, ha sido mas real cada vez, no digo que vea a Dios, pero si lo siento mucho más real en mi ser. Como en un principio yo era tan religioso como me habían formado, me di cuenta de que para nada esa ideología me acercaba a alguien, solo a la filosofía humana, disque para hallar la verdad espiritual.

Como Jesucristo si ha llenado esos hoyos de mi alma, si me ha ido contestando lo que otros no pueden contestar, porque las religiones solo dan explicaciones a cuestiones meramente humanas, que nada tienen que ver con la fe, he aprendido a tomar la decisión de creer en quien en verdad es creíble; en la verdad, en el camino seguro al padre, En Jesucristo.

 En realidad, las personas solemos creer en cualquiera cosa que implique un salto de fe, que de alguna manera nos aclare aquello que nos inquieta, que nos dé alguna explicación a nuestras inquietudes, aunque eso sea una persona.

 Nuestra vida siempre estará incompleta si solo nos llenamos de metáforas y demas figuras literarias incompletas que se cuentan en los libros de historietas, tales como lo es la mitología greco-Romana, egipcia y demás. Tantas como las que hay en el Antiguo Testamento, de la biblia. Todos esos muñequitos que se pintan para enseñar a los niños a creer, que te motivan a seguir leyendo y a desear ser como esos super héroes para llenar ese espacio; pero nada de fe.

 Cuando pasamos por necesidades no hay nada más que lo que tenemos enfrente, más que esta vida que nos tocó. Entonces, como creemos que no hay nada más, vale agarrarse de lo que hay, de aquello que nos ofrecen, lo que nos tocó, bueno o malo, porque es lo único que tenemos.

 Pero en verdad, la vida no se acaba cuando nos entierran.

 Entonces, ¿Cómo vamos a pasar la vida mientras estamos aquí?

 Si tú no tienes a nadie que te cuide, a nadie que te importe, entonces, estás perdido. Pero en realidad, tú y yo SÍ que somos afortunados, tenemos quien se ocupa de cada situación de nuestras vidas, sí hay quien, aquí y ahora. ¿Sabes?

 En todo mi ser hay un Dios que ayuda a toda persona que lo llama o le clama, sean pobres o ricos, feos os bonitos, sin importarle la raza o el color de piel, o de las mismas creencias que tengan; Dios está siempre dispuesto a atender a quien le cree y lo llama.

 Estoy seguro de que una vida sin Dios, sin fe, sin Jesucristo; es muy dura de vivir, una vida bien jodida, y eso afecta a la mayoría de las personas de este mundo, porque a la mayoría de las personas les tocó una vida muy jodida.

 Entonces, si en tu canción o melodía diaria no está la idea de Dios, No hay celebración en tu vida. Porque precisamente si no existe Dios, significa que “aquí es la fiesta”, y lo que tenemos ahora mismo, por las desgracias que pasan los seres humanos sin Dios, solo produce nauseas, ganas de vomitar.

 Creo que pasamos por un memento de mucho pesimismo, porque nos han cambiado el orden de las cosas, todo se ha ido al traste, tanto la salud como la economía. Hay dos formas de ver la vida, o no somos nada o somos todo en esta inmensidad.

 Entonces, si una parte de ti cree en Dios y la otra no, estamos perdidos, porque así no llegaremos a ningún lado. O creemos o NO creemos.

 Pero si tú dices creer en Dios, persevera hasta ver la respuesta a tus oraciones, y si no las ves aun, piensa en la sonrisa de tu madre, en tus hijos o en las personas que te quieren, siempre verás y sentirás el amor cerca de ti.

Dios no es una figura como tal, tampoco el amor, son los ojos que te ven, la sonrisa que te alegra el rato, nadie te va a querer más que los tuyos; ahí está Dios, eso es Dios, el Amor. Y es tangible, ahí está, lo puedes ver y sentir.

Las historias que te cuentan no son tan importantes, lo es tu experiencia, lo que te produce valor, ánimo y entusiasmo; tu propia historia.

Si tú no crees en Dios y eso te hace una persona conflictiva, con una estructura moral que no funciona, es hora de tomar una decisión y crear tu historia de fe.

Haz tu propia presentación donde estés involucrado con los demás, vale más lo que tú creas y vivas, que lo que otros digan y hagan.

Nadie es perfecto, pero el hacer las cosas bien hechas, es el camino a la perfección.

Mucho trabajo nos ha costado, sobre todo, en cuestiones de fe, para llegar a donde estamos, luchando y batallando contra nuestras dudas, miedos y temores, como para causar más conflictos con aquellos que siguen otras ideologías.

Hemos estado trabajando en cosas importantes como para dejarlas de lado y cambiarlas por otras, en Cristo tenemos todo lo que necesitamos.

¿Será que, por ser un tanto liberal-rebelde a las causas de otros, mi fe y mi espiritualidad está jodida, perdida, o me condenaré o cualquiera otra interpretación ajena a mi propia conciencia de Dios?

Si somos personas responsables, amorosas, cariñosas y generosas con los demás, estamos de acuerdo. Esa a de ser nuestra religión. Y así llegaremos al cielo.

Así es como yo lo veo… Qué opinas tú, brother. 

Jesucristo te ama y te bendice.

JoseFercho ZamPer

sábado, 25 de septiembre de 2021

Sobre la Biblia

 

La maravillosa historia de la Biblia.

Es el libro más vendido de la historia, en 1569 fue traducido por primera vez al castellano.

Para empezar, la biblia no es uno solo libro, sino que son entre 66 y 72, según se trate de evangélicos o católicos.

Einstein decía que en los grandes temas de la vida no existen las coincidencias, sino la armonía del universo.

Esto es lo que ocurre en la historia maravillosa, asombrosa y hermosa de la Biblia.

La Biblia no es un libro de consejos o catálogo para que se inspiren las beatas, es un profundo tratado, sobre las grandezas y miserias de la condición humana.

Con grandes valores éticos y espirituales, y una incomparable calidad literaria, agradable de leer, con imágenes extraordinarias que describen cada suceso con absoluta exactitud, cada lugar, cada protagonista, la hora precisa en que sucedió cada hecho, el más mínimo detalle, cada pueblo en el que estuvo Cristo, con el lenguaje apropiado y concreto, como testimonio de una época crucial en la historia humana, y de una auténtica revolución espiritual.

De manera que la Biblia se ha convertido en un libro clave para la cultura universal, tanto así que con el paso de los años se volvió una especie de guía moral para los pueblos del mundo occidental.

La Biblia es la buena noticia o el mensaje de amor que la humanidad necesita.

La Biblia o sagradas escrituras, fue escrita durante mil años, desde el siglo IX antes de Cristo hasta el primer siglo de nuestra era.

El Nuevo Testamento, al que solemos referirnos como ‘el evangelio’, narra la vida y obra de Jesucristo. Pero antes de que Jesús apareciera, ya existían los libros que se conocen como Antiguo Testamento. Son los que narran la historia de los judíos en Israel.

Los investigadores serios, auténticos científicos de la historia, coinciden en considerar que todos los relatos de ese Nuevo Testamento empezaron a escribirse cuando ya habían transcurrido unos veinte o treinta años de la muerte de Jesús.

Hoy se le dice a una persona “usted es la Biblia”, para indicar que es sabio, que tiene conocimiento de todo, que posee una vasta cultura y una educación profunda.

En estos tiempos ya hay muchas versiones entre las cuales se destacan la española, conocida como ‘la Biblia de Reina y Valera’.

En la Biblia se unen géneros de toda clase –me diHay poesía, canciones, erotismo, crónicas, historia, teología, amoríos, disputas.

 En su entorno hay muchos burros, camellos, cerdos. Al fin y al cabo, es un ambiente de pastores y agricultores.

La Sociedad de Editores de Europa, dejan a cualquiera con la boca abierta: 4.000 millones de ejemplares se han vendido en el mundo entero.

Es el libro más comprado en la historia de la humanidad, tanto así que esa cifra corresponde a más de la mitad de todos los habitantes que tiene la tierra.

En el año de gracia de 1452, cuarenta años antes del descubrimiento de América, un orfebre alemán llamado Juan Gutenberg inventó la primera imprenta moderna en la ciudad de Maguncia. La estrenó imprimiendo catorce líneas de la Biblia.

Esas poquitas palabras son el primer libro impreso del que se tenga noticia. El original se conserva hoy, como un tesoro auténtico, en la biblioteca del Congreso de los Estados Unidos.

Cuando corría el año 1569, 117 años después de la hazaña de Gutenberg y ya la imprenta se había regado por los rincones del mundo, apareció la primera traducción en lengua castellana, tomada directamente del latín.

El traductor fue Casiodoro Reina y la revisión del texto estuvo a cargo de su compañero Cipriano de Valera, ambos sacerdotes y ambos españoles.

El cardenal inglés Stephen Langton la dividió en capítulos en el siglo XIII. Y después el impresor francés Robert Estienne fraccionó esos capítulos en versículos para facilitar su lectura.

De Noé a Jesús

Allí, en el Antiguo Testamento, es donde aparecen Adán y Eva como “los primeros hijos de Dios” y las epopeyas de personajes prodigiosos, como Noé tratando de salvar a la humanidad de la extinción por el diluvio, o como Moisés a la cabeza del pueblo cuando ocurre el éxodo de los judíos desde la esclavitud en Egipto, y a través del desierto interminable, en busca de la tierra prometida.

 

martes, 7 de septiembre de 2021

Mis confesiones sobre el cristianismo.

Te advierto, quien quiera que seas, Tú que deseas sondear las profundidades del ser que, si no hallas dentro de ti mismo, aquello que buscas, tampoco podrás hallarlo fuera.

Si tu ignoras las excelencias de tu propia casa, ¿Cómo pretendes encontrar otras excelencias? 

En ti se halla oculto el tesoro, de los tesoros. Oh Hombre, conócete a ti mismo y conocerás a Dios.

Como pueblo somos una amalgama étnica, espiritual y cultural.

El problema humano. 

Se han cometido muchos estropicios en nombre del amor o de Dios, definitivamente son muchas las barbaridades que se han cometido.

La vida ha evolucionado con el paso de los siglos, pero los estándares de calidad dejan bastante que desear.

A lo largo de la historia algunas personas han dado por supuesta la buena fe, seguramente, pero por exceso de soberbia, han llevado a muchas personas a las puertas del infierno o de la muerte aprovechándose de su desesperación. 

¿Por qué será que los impostores nos engañan con tanta facilidad?

¿Será porque estamos a la espera de soluciones mágicas a nuestros problemas?

Amar es mucho más que perdonar o pedir perdón, porque cuando se ama no ofendemos al otro, nuestros corazones son muy sensibles.

Recuerdo que en mi época de estudiante vi una materia llamada Humanidades, leí un tema que no recuerdo en detalle, pero sí lo profundo de tal pensamiento, algo sobre la transformación cultural y el conocimiento de Dios.

Originalmente somos una mezcla de culturas, la española (fuertemente influida por el islam), la indígena y la africana, combinadas y adaptadas a las circunstancias locales. 

Lamentablemente, el catolicismo tradicional con su “religiosidad popular” abrazó muchas supersticiones y preferencias locales, añadiéndolas a su bagaje histórico de desviaciones y suposiciones, tales como el culto mariano.   

Sólo en el último medio siglo se ha fomentado la lectura y aplicación de la Biblia, lo que ya está produciendo una fe más eficaz entre el pueblo. Al haber una ausencia de Dios sobre nuestras vidas, se cultiva una adhesión emocional a una falsa “madre” como resultado, se vive sin la protección de un Padre espiritual; somos huérfanos espirituales apegados a un autoengaño.

Careciendo de la justicia divina, aceptamos la humana y con ella el fatalismo que nos lleva auna serie de errores e injusticias que nos mantienen ignorantes, pobres, e insatisfechos; por ende, infelices.

 Nuestra cultura ignora la obediencia a Dios, engañándonos y llevándonos a un subdesarrollo espiritual, incapacitándonos para ejercer autoridad y gobierno sobre nosotros mismos, sometiéndonos a una falsa confianza a la “Santa Madre Iglesia” y a un Estado indolente, quienes se hacen cargo de la indefensa ciudadanía.

Esa falta de responsabilidad que nuestra cultura propaga es la responsable de nuestro subdesarrollo y atraso, en comparación con otras naciones del mundo. 

Gracias a Dios, se ha estado sembrando la semilla de fe en Jesucristo desde hace algún tiempo, y poco a poco esa semilla ha estado dando frutos en un nuevo cristianismo más personal y Bíblico, que la fe tradicional.  

El pobre conocimiento de las escrituras ha favorecido la influencia de los avivatos con una especie de mezcla evangélico-marxista.  

El poderío de la iglesia norteamericana por más de 100 años ha estado liderando entre nosotros con ideas anglosajonas. Sus enseñanzas por sanas que sean ignoran los secretos de la familia y la cosmovisión latina. Ni nosotros mismos comprendemos nuestros problemas, menos ellos, con un cristianismo tan débil cómo para alcanzar algún liderazgo en nuestras naciones. 

La cultura moderna ha ido cambiando nuestra débil estructura espiritual, debido a las nuevas leyes sobre el matrimonio y los hijos, así como las relaciones sexuales, causando una inmadurez disfuncional en nuestras relaciones. 

Existe una guerra desatada por el peso de los pecados dejando unas ataduras culturales tóxicas que juegan un papel preponderante en las nuevas generaciones.

Se hace urgente retomar las verdaderas enseñanzas de Jesucristo en nuestro propio hogar, nuestros hijos necesitan modelos cristianos diferentes a los que la cultura tradicional ofrece, la iglesia de hoy esta herida y engañada por la serpiente.  

Por medio de la cultura y las artes se puede formar ciudadanos consientes y responsables, o, también se puede destruir la sociedad.

Se necesita construir una Cultura Cristiana evangelizando las culturas modernas con el fin de crear una nueva comprensión espiritual, esto requiere mucho tiempo, ya que la inculturación significa una íntima transformación de los auténticos valores culturales mediante su integración en el cristianismo y la radicación del cristianismo en las diversas culturas.

Esto no es una simple adaptación de nuestra cultura a una íntima transformación cristiana, las culturas humanas hacen su mayor esfuerzo por mantenerse firmes en sus tradiciones, ellas deben ser impactadas por la palabra de fe, por el amor, al proclamar la palabra de Dios a los pueblos hoy.

 Hay que evangelizar, pero no de una manera decorativa, como con un barniz superficial, sino de manera vital, en profundidad y hasta sus mismas raíces. Si los guardianes de la fe se cuidaran de la infidelidad y, sobre todo, si tuvieran discernimiento, la iglesia podría ser purificada, elevada y perfeccionada. 

Las culturas del hombre en el sentido amplio tienen sus términos bien planteados en sí mismas, ellas dan cuenta de una relación entre personas y sus costumbres, más, el cristianismo busca con toda claridad una relación de la persona consigo mismo y Dios. Esto no pretende un choque de culturas, sino una transformación interior del alma, en la forma de ver la vida, y del mundo a nivel espiritual. 

La expresión viviente de los grupos humanos lleva en sí misma fuerza cultural, si a ellas le inyectamos la fuerza del Espíritu Santo, obtendremos una cultura bien cimentada en los valores del amor.

La presencia de Jesucristo en la vida del ser humano debe aportar mayor claridad y verdadero sentido a la vida en comunidad. 

Es cosa noble estar dispuestos a comprender a todo hombre, a analizar todo sistema, a dar razón de todo lo que es justo. Dios va más allá de lo visible o comprensible para el ser humano. Jesucristo va a lo profundo de la conciencia humana, hasta tocar su interior, su corazón. 

El corazón del hombre solo se descubre o se esclarece con el amor de Dios manifestado plenamente en su propio ser. Jesucristo ha asumido nuestra naturaleza humana elevándola hasta la dignidad de Hijo de Dios, al hacerse hombre. Nuestro trabajo como Iglesia consiste en sembrar la semilla en el corazón y en la mente de los hombres para que hagan parte del pueblo de Dios, dejando de lado los mitos y leyendas para las culturas de los pueblos.

En el Antiguo Testamento, no es el hombre el que elige a Dios, sino, Dios es quien sale al encuentro del hombre, y lo llama a su servicio. 

En el Nuevo Testamento, Dios se revela al hombre a través de Jesucristo su hijo, y luego pasa a habitar en el interior del hombre por el Espíritu Santo, haciendo de él su propio templo. Lo obvio sería que el hombre muestre una clara revelación de Dios en sí mismo.

Hoy vemos que el obrar de Jesucristo en la vida del hombre se redujo solamente a una predicación.

El contenido del evangelio no es un discurso abstracto, sino la acción inmediata de Dios sobre la vida del hombre, que toca la conciencia y cambia la realidad de quien lo cree, porque parte de la verdad de que Dios habita en él.

El Evangelio en concreto es la verdad de Dios revelada al hombre luego de la resurrección de Jesucristo, mostrando el obrar del Espíritu Santo entregado al servicio incondicional del hombre.

Si optas por la fe, te abres de manera consciente y activa a la acción del Espíritu Santo para liberarte del pecado y llevarte hasta su presencia. Solo el Señorío de Jesucristo en el hombre, puede combatir y eliminar el poder esclavizador del pecado. 

Cultura es todo aquello con lo que el hombre afina y desarrolla sus innumerables cualidades espirituales y corporales. Un estilo de vida común, aunque con diversidad de valores. La cultura es un conjunto formado por distintos sistemas: los de representación, los normativos, los de expresión y los de acción; un proceso constante donde la sociedad es significada por un grupo humano, pero a la vez, la persona es configurada por la sociedad significante. 

Las iglesias hoy nos vemos de cierta manera, como seguidores de normas y mandatos estructurados como pilares de la cultura.

Dios crea al hombre, según la imagen de Jesucristo, haciendo comunidad con él, habitando en él. Jesucristo anuncio el Reino de Dios para hacer conscientes a sus oyentes de la acción creadora de Dios habitando en ellos.

El discernimiento de los valores culturales implica necesariamente un esfuerzo pastoral en dos sentidos, de un lado, un estudio minucioso y serio de la cultura concreta que queremos evangelizar, y de otro lado, criterios evangélicos bien definidos, de discernimiento.

Detrás de una cultura cristiana subyace una imagen del hombre ideal; pues se trata de que fuimos hechos a imagen de Dios. Le damos sentido a la vida sirviendo y siendo útil al otro, de lo contrario viviremos frustrados y encerrados en nuestros intereses. 

Jesucristo inicio su labor evangelizadora llamando a un grupo de pescadores con quienes conformó su equipo de trabajo, quienes fueron los primeros evangelizados. 

El Grupo de Discípulos predicaron el Reino de Dios y vivieron la misericordia, a través del servicio a la comunidad. Tenemos presente que el propósito de Jesucristo en su vida pública fue el anuncio del Reino de Dios, para hacer que suceda realmente en este mundo, haciendo visible y concreto el amor de Dios, su misericordia a los hombres.

Jesucristo impregnó con lo que él mismo era y vivía, a través de su presencia y trabajo cotidiano en las personas a quienes les predicaba su palabra.

En los Evangelios existe una conexión entre "fe" y "sanaciones. Ante todo, la "fe" como acogida al poder misericordioso de Jesucristo que tiene capacidad divina para salvar.

Saber entender el amor de Dios en la praxis de misericordia, con sus milagros que llegan hasta el fondo del corazón y lo toca con la fuerza seductora de su amor.

Tomando en cuenta el relato de la conversión de la vida de Pablo, se descubre que jesucristo a quien él persigue, es quien abre el corazón de Saulo a la experiencia íntima del Salvador. La respuesta de Pablo a esta revelación fue una apertura a la obediencia de la fe. En consecuencia, Jesucristo transforma en cristianos a los hombres que por la fe en Cristo buscan la purificación.

El proceso de inculturación del Evangelio implica tareas y responsabilidades, que de acuerdo con lo expuesto, podrían reducirse a las siguientes:

Un conocimiento serio y críticamente confiable de la realidad cultural concreta que se quiere evangelizar y de sus distintos sistemas. pero sobre todo sus valores, de tal manera que se perciba cual es la figura ideal humana individual y social que subyace en tal cultura y que se busca construir.

Criterios claros de discernimiento que permitan distinguir la autenticidad de los valores que se deben asumir como cristianos, para autenticarlos y promoverlos como tales, y sirvan al mismo tiempo de fermento, de tal manera que provoquen, desde dentro, la corrección de los desvalores y el cambio de las estructuras inhumanas. Este proceso traerá como resultado la configuración de una cultura cada vez más definida como cristiana.

No se trata solo de retórica, en concreto debemos ser imagen revelada de Jesucristo en nosotros, ello quiere decir, que no es meramente un enunciado doctrinal, sino el acontecer real de Dios vivo en el ser humano que se revela, esto es ser un testigo.

Lo que implica una personalidad cada día más espiritual que humana, no sólo la concepción de su fe, sino, sobre todo que se garantice un testimonio real de vida.

El propósito de Jesucristo cuando anunció el Reino de Dios en la Iglesia primitiva fue la edificación de una comunidad, familia y cuerpo de Cristo, de tal manera que fuera ella misma el acontecer real del Reino de Dios o del Evangelio.

Sin duda, las creencias y prácticas religiosas han estado presentes en la definición, la producción y el procesamiento de los grandes problemas que aquejan al hombre. 

A nivel general, el catolicismo ha dejado de ser el espacio de articulación hegemónico de las creencias; entraron en escena diversidad de religiones y con ellas, una diversidad de problemas sociales. 

A menudo la intervención de ciertos sectores de las iglesias, entran en conflicto con otros sectores creando líneas de quiebre que abren complejos espacios de discusión, producto de la diversidad de temas que se abordan y se entrecruzan entre ellas.

Por ejemplo; la cuestión de la desigualdad social y las religiones, los migrantes, las diversas fiestas populares, ponen en evidencia el cruce entre religiosidades y pertenencias nacionales y étnicas, a la vez que los profundos sentidos de las espiritualidades populares, la encrucijada entre Teología y Ciencia.

Vivimos una crisis de fe por el mal comportamiento religioso de los dirigentes espirituales y sociales en estos días. 

Se esperaba que, con la evangelización de lo social, se transformaran las relaciones personales y sociales, y contribuir en la construcción de un proyecto de país solidario, justo y fraterno. Pues se dice que, el encuentro con Cristo a través del conocimiento de su mensaje de amor y salvación, transforma el corazón de los seres humanos igual que sus relaciones personales.

Dios escucha el clamor de su pueblo, así lo ha hecho antes, pero necesita de su iglesia para atenderlos. Dios se propone abrir los ojos y los oídos de los cristianos para que puedan escuchar dichos sufrimientos; así tomar en serio nuestro papel como agentes de cambio en las realidades que atentan contra la dignidad humana.

El auténtico desarrollo del hombre concierne de manera unitaria a la totalidad de la persona en todas sus dimensiones, toda la Iglesia, en todo su ser y obrar, cuando anuncia, celebra y actúa en la caridad, tiende a promover el desarrollo integral del hombre”. 

Jesucristo nos enseñó a entrar en relación con el otro desde el amor y no desde el juicio, al conectar con el corazón de la persona humana y no con su pecado. 

Porque nosotros nos fijamos más en la falta del otro que en el bien que él produce.

Ese camino hacia el futuro deseado exige que nos detengamos y escuchemos el mensaje de Jesucristo, para discernir si nuestras acciones y estrategias son las adecuadas y están dando los frutos deseados. Este discernimiento es necesario para continuar por la ruta de la transformación.

Jesucristo realizo su misión recorriendo las calles, las aldeas y las ciudades, allí predicó el evangelio del Reino, sanó a muchos, y sirvió a las necesidades de la gente de la época. 

Asumir como cristianos el servicio al otro, en todo lugar donde nos movemos, es mostrar que somos discípulos de Jesucristo, asumiendo nuestro papel de obreros aprobados por Dios.

No ignoramos que el mundo está caído y bajo la influencia del maligno, pero no podemos perder de vista que Cristo en la cruz reconcilió todas las cosas, las que están en el cielo y las que están en la tierra.

Lamentablemente, las relaciones entre cultura y fe, sin hacerlo de manera correcta nos trae más problemas que soluciones en el mundo contemporáneo. Parece que la globalización no es la mejor alternativa para resolver nuestros problemas sociales, esto se convirtió en una industria cultural, así todo pierde sentido.

En América Latina hay muchos pensadores cristianos y pocos trabajadores eficientes para la incorporación de las clases marginadas en el proceso de construcción de un mejor vivir.

Ser cristiano implica trabajar por la construcción de Justicia social. 

La pérdida de libertad y de las condiciones de realización personal y colectiva son generadoras de la pobreza de los individuos. Estos hechos conducen a buscar una salida que trate de reconciliarnos con nosotros mismos.

Para llevar una “buena vida” se requieren fines y estos fines pueden ser valiosos no solo en sí mismos, sino también como medios. Supone la promoción de las oportunidades de la vida, la libertad y la búsqueda de la felicidad. 

La búsqueda de la felicidad es la motivación de la vida, en lo personal y en lo colectivo y tiene que ver con el progreso, la equidad y el logro de la paz social. Las ideas, las costumbres, los valores, los productos y virtudes. 

Los cristianos como Agentes de Transformación

¿Qué problemas enfrentamos para ser agentes de cambio? 

Resulta difícil ejercitar nuestros valores por nuestros malos hábitos.

La idea de ser agente de cambio en este contexto implica nadar contra la corriente.

Por ejemplo, la mentira es un mal arraigado en la mentalidad y conducta de muchas personas. Se miente para evadir responsabilidad, ocultar pecados o para sacar provecho de otros. Vivimos en una sociedad donde la mentira se ha vuelto parte de la vida, y la levadura que fomenta la corrupción. 

¿Contribuyen los cristianos a la transformación de valores y conductas que contradicen los valores del reino de Dios? 

No dudamos que las iglesias cristianas han sido de bendición a favor del bienestar espiritual y social de personas, familias o comunidades de su entorno. Sin embargo, el contexto de violencia, corrupción, desigualdad y otros males más, muestra que hace falta mucho para transformar la cultura y realidad del país. 

Por esta razón, es necesario revisar nuestra identidad como pueblo de Dios y tener conciencia de nuestro rol en el mundo. Sólo de esta manera podremos ejercitar una ciudadanía que sea acorde a los valores del reino de Dios, y que responda a los retos y desafíos del mundo actual.

Los cristianos no escapamos a la tendencia de acomodarse al sistema de valores y estilos de vida imperante.

Muchos cristianos están viviendo el evangelio de manera indigna o no ajustados a la altura del llamado a ser hijos de Dios.

Los evangelios muestran que la vida de Jesús, sus enseñanzas y su forma de pensar, desafiaron las tradiciones humanas, la cultura predominante y la religiosidad externa sin fruto. 

Los cristianos debemos vivir según las normas y valores del Reino de Dios, mas no ir en contra de la cultura del pueblo. Debemos ir más allá de los patrones culturales establecidos en la sociedad. 

¿Qué implica ser la sal del mundo? 

La metáfora de la sal hace alusión a dos acciones concretas: Dar sabor y evitar la corrupción. De manera figurada “salar” significa da sabor a un mundo lleno de sinsabores, decepciones, pesimismo, dolor, muerte o desesperanza. El evangelio trae consigo la promesa de salvación integral para la persona, perdón de pecados, la vida del Espíritu, y la plenitud de vida en Jesucristo. 

Si los cristianos son la sal deben trae la vida del evangelio al mundo. Esto significa que los cristianos deben proclamar y vivir las buenas nuevas del evangelio: En la medida en que lo encarnan los no creyentes podrán escuchar y ver el evangelio a través del vivir diario de los cristianos. El Señor invita a todos los que nos reconocemos sus discípulos, a mostrar en nuestra vida diaria los signos de la plenitud de vida del evangelio, pese a nuestras fragilidades y limitaciones humanas.  

Por otro lado, significa evitar la “corrupción moral” de la sociedad. Por supuesto, el reto para los cristianos no se limita a dar un buen testimonio o al impulso de proyectos de servicio. 

Si la voluntad del hombre es forzada, ya no es voluntad.

Sino reconocemos ni aceptamos la necesidad de cambiar, es porque estamos dominados por nuestro subconsciente, una especie de espejo retrovisor que revive y recrea continuamente nuestro pasado.

En consecuencia, cada decisión que tomamos viene determinada por el filtro de las limitaciones de nuestras experiencias pasadas. 

No importa tu pasado, sino a dónde quieres llegar. Somos susceptibles de cambios. Nuestra vida es el resultado de nuestros hábitos, y para cambiarlos se necesita disciplina y trabajo. 

Todos hemos sido domesticados desde niños, debido a la forma en que nos criaron y fuimos educados, nos dijeron que hacer o decir, nos hicieron creer en personas y cosas que ya no existen, y tomamos decisiones que nos ayudaron a ser mejores o nos arruinaron la vida.

Si bien es cierto que lo aprendido nos determina, ya es hora de liberarnos de los errores pasados y aprender a hacerlo bien. No tienes por qué seguir siendo el mismo, tú cuentas con la capacidad para alcanzar tus objetivos. Es la hora justa para empezar a trabajar en la persona que quieres ser.

Nos damos cuenta de que los seres humanos tenemos una fastidiosa costumbre de hablar mal de los demas, y de culpar a los otros por nuestros errores, esta actitud muestra la incapacidad de encarar nuestras falencias para superarlas. 

Las soluciones se alcanzan con propuestas innovadoras que muestren un verdadero interés de mejorar las condiciones de vida de las personas, y no tratando de escusarnos en viejas fallas o errores para justificar nuestra falta de compromiso con el cambio; esto nos lleva a vivir una vida mediocre.

En el transcurrir de la vida nos encontramos con obstáculos que nos impiden seguir por donde vamos, pero muchos de ellos son puestos para corregir el mal camino que seguíamos, debemos seguir adelante, pero siendo conscientes de las distintas posibilidades de cambiar y mejorar nuestro caminar.

El hombre que se observa repetidamente en el espejo y no nota cambios en el, o no quiere reconocerlos, está pasando por un estado confusional agudo, o está bajo el efecto de sustancias alucinógenas, y su estado de ánimo puede variar hasta la ansiedad, por falta de reconocerse así mismo tal y como es hoy. 

Aquí es donde nos hacemos conscientes de la necesidad del actuar poderoso y amoroso de Dios y de retomar sus enseñanzas para el bien de nuestras vidas.

                                                       Jesucristo te ama y te bendice.

                                                                                                                    JoseFercho ZamPer


sábado, 28 de agosto de 2021

Libre soy

Hoy me envuelves con tu canción

En verdad, en ti encuentro libertad

Caminos se me abren al andar

Tu melodía me infunde paz


Desde el vientre de mi madre 

Me llamó el Señor

Nací y viví en dificultad

No sabía qué sería de mi

hasta el día que te conocí


En tus palabras mis principios se afirman

Vuelan con alas de libertad

Me enseñas a caminar por la vida 

Con una sensación de santidad


Con tu paz llenas mi caminar

Libre me siento al andar

tus brazos llenos de amor

mi vida cambiando estás

Es evidente en mí, tu actuar

Aprendo a hacer tu voluntad.


JoseFercho ZamPer 



viernes, 16 de julio de 2021

Mi renacer

 Aleluya, alabado sea el Señor

Dios todo poderoso

Escuché una voz en lo secreto

Que me invitaba a alabar a Dios

 

Realmente te agrada la alabanza

Me preguntó con añoranza

La voz que desde dentro me decía

Tu pena por la lejanía y la ausencia

De tus seres queridos

Te han privado de algo muy hermoso

Como lo es el disfrutar de mi compañía.

 

Vamos por el cuarto o quinto intento

Tus caídas son mayores a tu avivamiento

Vives desconcertado por tu sufrimiento

Queriendo componer lo descompuesto

Bueno, si no fuera por esto

Tu fe estaría tan muerta como tu cuerpo

 

Necesitabas pruebas

para volver a mi encuentro

Te pasaste la vida mirando hacia el techo

Sintiéndote satisfecho

 

La belleza de la noche

y la luz de la luna

derrocaron tus intentos

de alcanzar el trono del universo

y tus labios se resecaron

de tanto parlamento.

 

Cariño, cuanto lo siento

he estado aquí siempre junto a ti

y no te has dado cuenta

he visto tu sufrimiento

 

Sabes, te conozco desde

antes de conocerte

Y he visto tu bandera izada en tu fuerte

Pero tu amor no ha sido suficiente

has huido justo antes de la muerte

por eso la victoria te ha sido indiferente

 

Pero, ahora es justo el momento

Cuando realmente estás dispuesto

todo lo que has sufrido me atrajo

Ya no escucho solo tu lamento

 

Puedo ver tu esperanza y aliento

alguien que no está roto por sufrimiento

cuya fe la lleva por dentro

Después de cuatro años del evento.

 

 

JoseFercho ZamPer

martes, 13 de julio de 2021

EL COMA ESPIRITUAL

 Un buen día me desperté sintiéndome extraño, sentía que nadie me escuchaba.

 Sin embargo, cuando me hablaban parecía titubear por el frío de las palabras, y sin nada que poder hacer al respecto.

 Una persona en estado de “coma espiritual” intriga, aunque está despierta y se mueve es inconsciente de su necesidad de Dios.

 Muchos pueden sonreír, llorar, gemir o gruñir, pero son indiferentes e incapaces de entender el sentir de los demas. La tragedia es el no tener conciencia espiritual.

 Cuantos están en un estado inconsciente, atrapados entre la sensibilidad y el olvido.

 Consideremos a aquellas personas que están atrapadas en su mundo de inconciencia espiritual, entre la vida natural y la muerte. Son personas que no pueden entender ni hablar sobre jesucristo, estas personas simplemente están muertas en vida.

 La situación de algunos en estado de coma espiritual es que se encuentran encerrados en sí mismos. Aunque el cerebro este consciente y haya flujo de sangre, no quiere decir que uno este consciente.

 La vida espiritual depende de "cómo está mi relación con Jesucristo".  Como se iluminará la penumbra entre lo consciente y lo inconsciente.

 ¿Qué es el coma espiritual?

Es un estado profundo de inconsciencia, la incapacidad de sentir y pensar en el espíritu.

 Muchas personas que asisten a la iglesia se sienten decepcionadas de ella, porque alguna persona lo decepcionó. Estos son los que andan en estado de “coma espiritual”.

 Estas personas no son conscientes de su relación con Dios, de su necesidad de una vida espiritual real. Existe una incapacidad de comunicación entre su alma y el espíritu, pero dicen ser conscientes de sí mismos y de su entorno.

 En muchos cristianos existe la duda recurrente.

 El estado de coma espiritual se reconoce por la ausencia de respuesta al dolor que causa el pecado, tanto ajeno como propio. Estas personas están controladas por acciones involuntarias. El asunto aquí es que la decisión sobre la vida de estas personas en este estado de coma espiritual depende más de su familia y de la iglesia que de ellas mismas.

Esto quiere decir que una persona en este estado es incapaz de salir de él, sin un verdadero compromiso de oración de parte de aquellos que le rodean.

 Hay suicidios concretos y hay semi suicidios simbólicos para escapar del dolor de esta “vida sin sentido” sin tener claro “para que vive” y solo sobrevivir un día más “cumpliendo con nuestra rutina”.

 Miles y miles de personas han decidido dejar de existir como seres pensantes y ponerse en un “coma espiritual” haciéndose fundamentalistas de alguna religión, manteniéndose en un oscuro estado de pérdida prolongada de consciencia espiritual. 

 Es un estado profundo de pérdida del conocimiento de Dios, la persona es incapaz de reconocer su necesidad de una relación espiritual,

 Como hemos visto, si la persona que experimenta pérdida de consciencia espiritual no hace nada al respecto, experimentará un estado de oscuridad sobrecogedor, que lo llevará a perder sus capacidades de hacer el bien y de servir al prójimo; hasta llegar al “coma espiritual” quedando como muerto en vida.

 Las preguntas son buenas, llevan al conocimiento y a la comprensión, y tal vez, solo tal vez, a la aceptación. Mas, yo quiero entender.

 Efesios 5:14-17. Por lo cual dice: Despiértate, tú que duermes, Y levántate de los muertos, y te alumbrará Cristo. Mirad, pues, con diligencia cómo andéis, no como necios sino como sabios, aprovechando bien el tiempo, porque los días son malos. Por tanto, no seáis insensatos, sino entendidos de cuál sea la voluntad del Señor.

 Jesucristo te ama y te bendice.

JoseFercho ZamPer

miércoles, 7 de abril de 2021

Sobre la traición.

Un oscuro capítulo de la historia nos cuenta sobre como el hombre se traiciona así mismo y a los demas.

Judas traicionó a Jesucristo, algunos apóstoles dicen que fue por plata, otros por la tentación del demonio.

Se necesita un motivo para una traición.

De esto se trata la amistad, sobre la vida y la muerte de los hombres aquí en la tierra, en medio de la búsqueda de la igualdad de derechos para las personas.

Que no se nos quede solo como a los jóvenes revolucionarios, en meros discursos a una enorme muchedumbre de amigos y seguidores de las redes sociales, en donde no pasa nunca nada.

Aunque todos profesan estar muy atentos y cautivados por su mensaje; ese de “Yo soy un revolucionario”, un líder que represento un cambio para las minorías en busca de las mismas oportunidades para todos, ofreciendo un mundo mejor, pero en su interior podemos observar a Judas, siempre amenazado por sus pecados del pasado.

La traición es todo un drama en términos cristianos, en donde se pretende obtener libertad y dinero, lo que nos deja en un callejón sin salida que solo nos da espacio para la culpa.

El congraciarse con el poder terrenal solo nos lleva a la perdición del alma, esto es un peligro inevitable, un riesgo vital que va más allá de las ideas.

En este contexto cuando se utiliza el engaño para influenciar al hombre se cae en la injusticia social bajo la forma de “el estilo de vida”.

Cuando las cúpulas de la política se amparan bajo el “oficial de la ley” para engañar y abusar del pueblo, se teje la inconformidad y la violencia, y se anulan los esfuerzos por rescatar al pueblo de la discriminación.

La pureza del éxito del ser humano se ven empañadas por las artimañas diabólicas que dan cuenta de la presencia del mal, en forma de confabulación inteligente como esencia propia de las políticas discriminatorias mezquinas y oportunistas.

Esto equivale a la autodestrucción, el hombre por el hombre, la salvación de uno mismo termina generando la destrucción de la propia raza.

La culpa es retroactiva.

Cuantos de nosotros nos hemos pegado un balazo en las pelotas, por culpa de la culpa. Yo diría que muchos, o casi todos, como respuesta a la confusión frente al conflicto moral en el que vivimos en el caminar diario.

La culpa nos castiga desde el interior, y así es como debe ser, pues la conciencia almacena el mensaje que contribuye a disociar o a unir a la sociedad.

Es justo el momento para despertar de la pesadilla.

El descalabro de la sociedad genera un sinfín de problemas para el futuro.

La raza humana está contaminada por el demonio de la traición, el odio, el rencor, maldad que terminará ahogándonos en una revolución propia de la ingenuidad espiritual.

Jesucristo veía todos los pecados de la humanidad pasada, presente y futura, el demonio lo alentaba a que desistiera de entregar su vida en la cruz por los pecadores, diciéndole, “no vale la pena morir por una humanidad corrupta”, pero él prefirió hacer la Voluntad del Padre para darnos salvación, o Vida Eterna.

Como cristiano procuro cada día darle sentido a mi vida y solo en Jesucristo lo he hallado, pues el vino al mundo en cuerpo y conoció las injusticias, las tentaciones, el hambre y el frío, pero también disfruto de la gente, de la amistad, de la comida, y aun así no se apartó del camino de la verdad y de la vida, a pesar de que esto lo llevara a la cruz.

Por el cargo de conciencia muchos han preferido colgarse de las que sabemos, a cambio de pedir perdón por sus pecados.

Jesucristo ya sabía su final antes de su arresto.

Aunque asistamos a la iglesia, si en verdad no creemos que Jesucristo es Dios, y único Salvador, quien perdonó nuestros pecados, y nos da la vida eterna; estaremos sujetos a toda clase de incertidumbre espiritual.

Si nos limitamos a un solo punto de vista en la vida, y teniendo la capacidad para tomar nuestras propias decisiones, no lo hacemos, el enemigo de lo ajeno, de la paz, se nos anticipa y nos perjudica.

Cada uno es responsable por su decisión y tendrá que dar cuenta por ello.

Jesús caracteriza la participación de Judas como una traición. Y respecto a su responsabilidad por esta traición, Jesús dijo. “… mas ¡hay de aquel hombre por quien el Hijo del Hombre es entregado! Bueno le fuera a ese hombre no haber nacido” (Marcos 14:21).

Satanás también tuvo su parte en esto como vemos en Juan 13:26-27, y también a él se le tomarán cuentas por sus hechos. 

Satanás ayudó a enviar a Jesús a la cruz, y en la cruz, el pecado y la muerte fueron vencidos, y la provisión de Dios para la salvación está gratuitamente disponible para todos aquellos que acepten a Jesucristo como su salvador personal para el perdón de sus pecados.

Ya pasó la medianoche, pronto amanecerá, por lo visto, en vez de aprovechar el momento para salir de la oscuridad de la noche, muchos prefieren devolverse en el tiempo y seguir sufriendo la consecuencia de su falta de perdón y amor por si mismos y por el prójimo.

En conclusión, la falta de conciencia y la ausencia de liderazgo racional nos lleva a ser traidores de nuestro propio “estilo de vida”.


JoseFercho ZamPer.

domingo, 14 de marzo de 2021

Sobre el Conformismo.

El conformismo es la incapacidad de hacer lo que se debe con tal de cambiar la situación, como resultado de la presión real o imaginaria de los demás.

Se manifiesta tanto en las opiniones como en las acciones, por tanto, muestra la falta de juicio crítico para valorar a las personas, las cosas y los hechos de la vida. 

Debemos trabajar duro para superar el conformismo, sería conveniente descubrir qué nos lleva al conformismo, si es miedo o cobardía, evitar conflictos o resignación. Solo descubriéndolo podremos superarlo. 

Cuando superamos los miedos o la resignación, cuando admitimos la posibilidad de tener algo mejor de lo que tenemos, ya no habrá motivo para el conformismo. Entonces, será el momento de reflexionar, y decidir si seguir adelante, “sin conformarse”, buscando más caminos, más opciones, más oportunidades; que nada nos limite.

Y solo cuando yo lo decida y me sienta bien por ello, “me conformaré”, porque me permitirá disfrutar y aceptar la realidad, adaptándome mejor a la vida en todas sus etapas.

Y qué diremos de la influencia social, muchos ni cuenta se dan del constante bombardeo al que estamos expuestos y la mala influencia de las redes sociales y demás medios. 

Probablemente, alguna vez te has planteado por qué la mayoría de la gente tiene tendencia a seguir los dictados de la mayoría. 

El conformismo nos lleva a estar de acuerdo con la opinión de los demás con el fin de ser aceptados por la mayoría para así evitar el rechazo. 

Si uno de los miembros del grupo da una respuesta diferente a la mayoría, la presión aumenta las probabilidades de que el sujeto esté más inclinado a conformarse con la opinión del grupo, somos fácilmente manipulables.

Romanos 12:2 “No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta.

El conformismo es la conducta de aceptar las situaciones establecidas por cualquier ente, pueblo, grupo, es decir, las costumbres, opiniones, y poderes predominantes de una época que determinan nuestra manera de vivir. quizás esté siendo afectado por alguno de ellos en forma muy negativa.

La costumbre es la reiteración de actos que se hacen sin pensar porque están establecidos así, en otras palabras, es dejarse llevar por la corriente.

El desaliento es una actitud pasiva para la conquista, que ha afectado a miles personas desanimando y desmotivando a alcanzar sus metas.

El conformismo consume los mejores años de la vida de la persona, atándolo e impidiendo ser libre para alcanzar bendición, negándole la posibilidad de cambio y progreso. Normalmente al conformista se le ve como una persona mediocre.

El conformismo supone renunciar a nuestra forma de pensar, a nuestra frescura, a nuestra originalidad en favor de una mayoría, es capaz de minar nuestra autoestima hasta dejarnos sin iniciativa.

Vemos que el conformismo es el camino más fácil al fracaso, donde la mayoría sigue a la minoría hacia el abismo. 

La doctrina dogmática suele decir que la realidad es así, y le creemos a tal punto que no tenemos que pensarlo más, eso es conformismo.

En la medida en que le creemos más a los demas que a nosotros mismos, nos volvemos conformistas, muchas veces, solo por sentirnos aceptados. Finalmente, el conformismo nos lleva a la falta de autoridad.

El conformismo es la forma moderna del pesimismo

Existe una gran brecha entre lo que sabemos y lo que practicamos a diario. Sabemos que Jesucristo es nuestro libertador, pero vivimos como esclavos buscando consejos del mundo. 

Evidentemente querer agradar siempre a los demas sele ser una trampa para nosotros mimos. 

A la verdad, el amor es lo único que tiene valor en la vida, lo demás se puede canjear con lisonjas o engaño.

Frases sobre el conformismo.

“Los lugares más oscuros del infierno están reservados para aquellos que mantienen su neutralidad en épocas de crisis moral.”

“La culpa no está en el sentimiento, sino en el consentimiento.”

 “La comodidad y el conformismo son enemigos de la pasión, del crecimiento, de los sueños.”

Deja que los demás decidan por ti, que te manejen a su antojo, a ver a dónde vas a llegar…

“El mal está ahí, en la masa de los sufridos y los resignados, en el montón amorfo de los que están conformes con su suerte.”

“Ser desgraciado es creer que no necesitas el amor, te conformas con lo que eres cuando sabes muy bien que eres capaz de algo mejor.”

Me conformo con lo que me dan por miedo a salir a buscar lo que realmente deseo.

Si solo aceptas lo establecido, vives en un sonambulismo intelectual.

“Creemos que con la edad aumenta la prudencia, sin pensar que también aumenta el conformismo.”

“El destino está escrito por ti y tus elecciones”.

Si esta es nuestra actitud ante la vida, entonces ¿para qué esforzarse? ¿De qué serviría estudiar o trabajar, si todo viene con el destino?

Que Dios nos abra los ojos para ver y entender la verdad. 


Jesucristo te ama y te bendice.


JoseFercho ZamPer


jueves, 11 de marzo de 2021

Dame un Corazón puro

 


 

Oh, Dios, crea en mi un corazón limpio y puro

renueva tu espíritu dentro de mí

Limpia mi corazón de todo pecado

y guíame por tu camino recto.

 

Arroja de mi toda transgresión cometida,

y dame un corazón y un espíritu nuevo.

¿Por qué he de morir sin conocerte?

 

Enséñame a amar a toda persona con tu amor

A perdonar a quien me ofende con o sin intensión

Dame tu obediencia a la verdad

 

Tú que conoces el dolor y el sufrimiento

Renueva mi mente para aceptar tu palabra

Y cambiar mi vieja forma de vida

Esa que dejó en mí, un pasado rebelde

 

Deseo tu espíritu fiel a Dios

porque solo así seré mejor

Dame un corazón dócil

suave y tierno como para amar

aunque sea defraudado

 

Por tanto, solo la gracia de Dios

Hará que nuestro trabajo no sea en vano.

Ciertamente Dios es bueno con nosotros

Y fiel a su pacto.

 

Cuando levanto mis manos

mis ojos se elevan al cielo

pregunto con sinceridad,

Dio, dove sei, non posso vederti?

 

JoseFercho ZamPer

Sobre lo que crees.

Lo que se puede saber de la biblia se remonta a miles de años atrás. Jesucristo es el personaje central de la historia bíblica, su vida y ...