jueves, 26 de diciembre de 2019

La iglesia cristiana y su credibilidad.


Los ateos están aumentando a niveles récord, en los últimos años, el porcentaje de personas que dicen no tener una afiliación religiosa específica es cada vez mayor.

Este rechazo a la religión sin duda significa que en el país hay más "escépticos", que se identifican a sí mismos como ateos o agnósticos, esto ha aumentado en los más jóvenes y aún más en las mujeres. La independencia es una cualidad que durante mucho tiempo se ha valorado en los hombres, pero que ha sido visto como algo malo en las mujeres, está surgiendo una nueva generación de personas con la idea de que realmente está bien no creer.

No es fácil dejar atrás la religión familiar y toda una generación ¿verdad? Pero, ahora se piensa que con ser una buena persona es suficiente. Se que hay mucho por que luchar, pero, no estoy seguro de cómo lavar la ropa sucia.

Muchos asistentes a las iglesias viven infiltrados en un grupo donde no se mira hacia adelante, por lo cual no se logra nada. Pretendiendo solamente resolver diferencias más no las apariencias.

Los "predicadores de la prosperidad" vinculan el materialismo moderno con las creencias cristianas, desviándose de la verdad; ignorando que sus propias mentiras los destruirán al final.

Así que bájate de tu caballo, cuando la discusión se convierta en una batalla emocional de alto riesgo, "los pensamientos no están en nuestras cabezas". E incluso si se responden todas las posibles preguntas científicas, los problemas de la vida aún no se han tocado en absoluto.

Los sentimientos son una de las formas menos confiables para tomar decisiones. Siempre habrá algún filósofo tratando de dar respuestas sobre Dios, su confusión es total, pues ¿cómo saber por dónde empezar? ¿Podremos viajar a través del espacio sin fin? La razón frente a la ilusión, la ciencia no puede explicar todo por completo.

Al caminar por una calle oscura puedes ver criaturas extrañas, ¿eso es un gato o un perro? dices. Pero cuando te acercas puedes identificarlo. Es un "problema" de apariencia vs realidad. La respuesta a cada explicación puede ser un ¿por qué ... por qué?

La mayoría de la gente vive una vida natural sin tanta consideración por la ciencia, aunque en la práctica diaria estamos siendo todos unos científicos. En sentido amplio, la vida es un proceso de hacerse preguntas y buscar respuestas, y tratar de probarlas para saber cuál nos funciona. En este sentido, todos aplicamos la ciencia. El método científico se realiza regularmente en la vida cotidiana.
La creatividad nos hace más conscientes de lo que hacemos.
Todos somos libres de decir que Dios existe sin estar obligados a demostrarlo.
La arrogancia es una confianza injustificada en nuestras conclusiones.

Hoy la fe está en peligro, los jóvenes se encuentran en dificultades para vivir la fe cristiana. Se fijan más en lo que ofrecen las redes sociales que en los valores propios de la fe. Pero, sin fe no se puede vivir, porque la fe es la fuerza de la vida.

Los cristianos hemos sido llamados a vivir la Fe de Jesucristo, porque la fe no es lo más obvio de la vida común, se hace necesario abrirse a ella.

Para el 35% de jóvenes Dios no existe. Un 32% de los jóvenes argumenta que es un invento de la Iglesia y los curas, un 31% que es una superstición como otra cualquiera y un 24% apela a la existencia del mal en el mundo. En cuarto lugar (casi un 16%) aparece el argumento de tener cosas más importantes en las que pensar y en último lugar (12%) aparece el motivo “los científicos dicen hoy que Dios no existe”.  Un 62% de los jóvenes afirma no asistir a la iglesia. Sólo un 7% cumple con el precepto dominical de ir a misa, un 5% acude a la iglesia una vez al mes y un menor número de jóvenes, un 2%, acude más de una vez a la semana.

La Iglesia es una institución poco valorada, muy pocos consideran que en la Iglesia se dicen cosas importantes en cuanto a ideas e interpretaciones del mundo.

Con esos resultados, es evidente que la imagen juvenil de la fe cristiana y de la Iglesia resulta bastante negativa. Las causas de esta imagen negativa son tanto externas como internas. La opinión juvenil está muy condicionada por los medios de comunicación. Hay un problema de comunicación entre la Iglesia y los medios, que influye mucho en los jóvenes y sus posicionamientos religiosos.

La religión une la memoria de cada creyente con el pasado, presente y futuro de su familia y demás seres queridos,  creando así una memoria colectiva, de cuyo pasado se nutre dicha comunidad para afrontar el presente y el futuro.

Las sociedades apenas son capaces de conservar el hilo de memoria que las une con su pasado. La religiosidad cristiana era antes un río que se nutría de varios afluentes: la familia, la escuela, la parroquia pero, por razones evidentes, hoy esos afluentes bajan con poca o ninguna agua.

Así pues, la Juventud se aleja cada vez más de la Iglesia.
Muchos afirman “creer sin pertenecer”. Así, muchos dicen creer en Dios a su manera. Para otros “orar es pensar en el sentido de la vida”. Esto es una religiosidad silvestre”.

La fe es un acto personal y al mismo tiempo comunitario, donde cada uno recibe a Jesucristo para alcanzar la salvación.
Con todo, hay quienes piensan que buscarle sentido a la vida desde Dios, no es para los jóvenes, porque sienten que les manipulan sus pensamientos. La mayoría de los jóvenes no viven la fe, es decir, no viven una vida donde la fe se encuentre presente, donde la fe sea importante para ser felices.

Es mucho más fácil vivir la fe si compartes tus ideas y creencias con otros creyentes. La sociedad es más material que espiritual, y la mayoría se conforma con vivir el día a día para no correr el riesgo de que lo tachen de raro.

Más que falta de fe, hay mucho desconocimiento de Dios, los padres no lo conocen por tanto no pueden darlo a conocer. Los hijos aprenden de sus padres la fe, como algo normal en sus casas.

Sencillamente no hay experiencia de lo que es la fe, y con una mentalidad del mínimo esfuerzo, no se alcanzan resultados. Jesucristo para transmitir su mensaje se acercó a las personas y les mostró la fe como la forma de hacerse completo. Para ello, debemos ser más flexibles.

Yo creo que la semilla de la fe está en nuestro corazón, pero no ha germinado como debe ser, porque quienes decimos ser creyentes no practicamos el amor de Dios. La forma de pensar y de actuar varía mucho de los textos bíblicos.

Aunque muchos dicen “yo creo”, no están comprometidos con el más débil, a pesar de que a eso vino Cristo. Se vive sin sentido, vacíos por dentro.

Centrarse en Jesucristo es lo que nos  falta a los creyentes, profesar la fe con hechos, actuar con eficacia en favor del necesitado, es el testimonio de los cristianos. Sólo el Evangelio de Jesucristo puede llenar esos vacíos en la vida de la Iglesia, para que viva el amor de Dios en los creyentes y se muestre el testimonio a los otros. Los cristianos estamos llamados a confirmar con hechos las palabras de verdad de Jesucristo.

Muchos no han tenido ocasión de experimentar la fe como algo vivo y personal, como esa gracia que transforma a la persona en lo más íntimo.

¿Será que el hombre puede vivir sin Dios?  

¿Una planta sin sus raíces podrá vivir? Aunque mantenga su belleza por un tiempo, está destinada a marchitarse y morir. “Si Dios no existe”, entonces, “todo está permitido”. Pero ¿Cómo identificar qué es malo, o qué es bueno? Estamos llamados a someternos solo a la autoridad de Dios.

Hoy se enseña que un relojero ciego puede hacer caminar al unísono, todas las ruedas de manera aleatoria, esto explica por qué muchos abandonan la iglesia, ya que es infructuoso cuando se enseña la Biblia sin la aplicación de la fe; si no se demuestra el valor perdurable de las Escrituras en la vida. Debemos hacer todo lo posible por aplicar la verdad bíblica, y al hacerlo, aprenderemos cuán inagotable es la Palabra de Dios.

Otra razón para considerar es la falta de misión de la iglesia, no hay un papel fundamental en el plan de Dios. No se lucha por un objetivo para ser parte de algo más grande que uno mismo, pareciera un mero “sálvese quien pueda”. O un club social transitorio para escapar de la rutina.

La santificación es un proceso continuo de sometimiento a la Palabra de Dios y al Espíritu Santo hasta que Cristo sea formado en nosotros. Se necesita de un liderazgo bíblico que pueda guiar a la gente a un mundo mejor, a pesar de las malas noticias. Debemos someternos a la voluntad de Dios, que es para nosotros, buena, agradable y perfecta.

¿Por qué, según Jesucristo, la fe es mejor que la evidencia?

“La función suprema de la razón es mostrarle al ser humano que algunas cosas están más allá de la razón”, “La fe requiere la posibilidad del rechazo, o no es fe”.

Para muchos, la fe en Jesucristo carece de sentido. Y como no serlo si lo hacemos de manera “humana" -o a nuestra manera-. Los hombres creemos en "algo" y también le creemos a "alguien".

Y ¿Como saber si sobre lo que descansa la vida es verdadera o falso?
Todo conocimiento se alcanza cuando deseamos superar la ignorancia o el error.

Si "algo se" es porque me fue enseñado. Y "algo" sabemos, sin duda, aunque sea nuestra propia ignorancia. Sabemos que ignoramos, pero también que podemos aprender.

Por tanto, mi fe descansa en "alguien" llamado Jesucristo.

Muchas veces me he sentido huérfano, abandonado de padre, por tal razón, también hoy sé con certeza que soy hijo. Esto, por haber creído en Dios Padre a pesar del fracaso como padres entre los hombres de este mundo. Porque la maldad del mundo hace difícil creer en la bondad de Dios.

La venganza arruina a los hombres, y desacredita a Dios. Por lo que, no necesitamos que Dios se vengue por nosotros de los "malos" para liberarnos; Dios no se venga, Dios no castiga. Esta conclusión está implícita en el reino que Jesús ha proclamado a pobres y pecadores. De ella depende la liberación de unos y otros.

Lo que sí necesitamos experimentar es el amor gratuito del Padre por nosotros, “a Jesucristo” en nuestras vidas diarias. Su sacrificio "ha sido necesario". De lo contrario estaríamos perdidos eternamente. Así como, su resurrección constituye el triunfo de la fe. Quien cree en Jesucristo, no será defraudado. De aquí que la fe de la Iglesia radica en Jesucristo, quien es la fe.

Sin embargo, ingenuamente muchos han creído poder prescindir de los testigos de Cristo a lo largo de la historia. No hay duda de que aun tratándose de una fe que solo el Dios trino ha podido desencadenar, ella goza de la racionalidad de la que el Creador ha dotado a todas las criaturas humanas.

El cristiano en la sociedad actual

En esta sociedad tan deshumanizada y anárquica en todos los ámbitos de la vida, con una fe tan muerta, cada vez más sin Dios; se hace más urgente que los creyentes pongamos en práctica nuestra fe, y así alcanzar la certeza de la palabra y la seguridad de los hijos de Dios en la vida cotidiana. Dando ejemplo a nuestros semejantes, con nuestras palabras y obras en el día a día, buscando dejar una herencia de fe y amor a los nuestros. Con la convicción de que vendrán tiempos mejores.

La frustración viene cuando, después de haberse dejado llevar por las pasiones, se decepciona por no encontrar lo que se había idealizado en su inmadurez, esto crea un enorme vacío. En cambio, la piedad y el temor de Dios son provechosos para esta vida y para la eterna.

Cuando no nos aceptamos como somos estamos teniendo una actitud de rebeldía contra Dios. Es como decirle a Dios: “No estoy conforme con lo que has hecho conmigo”.
No trates de engañarte a ti mismo. Acéptate como eres y todo mejorará.

El Señor quiere que nos gocemos con todo y en todo, con sinceridad, confianza, respeto y cariño.

Pablo nos dice: “Huye también de las pasiones juveniles” 2ª Timoteo 2:22.

La pureza es algo que no se aprecia en nuestros tiempos, pero para Dios es muy importante. Somos templo del Espíritu Santo, por tanto, debemos cuidar el corazón; ya que las revistas, los periódicos, los libros y la tv, se encargarán de propagar la impureza haciendo ver como lo más normal de la vida.

Debemos dejar que sea el Señor Jesucristo quien nos abra el camino al futuro, quien nos guíe conforme a sus principios.

Jesucristo te ama y te bendice.


 JoseFercho ZamPer


sábado, 7 de diciembre de 2019

Navidad


Aquí les traigo mi cuento.

Navidad procede del latín Nativitas que significa ‘nacimiento’. Los angloparlantes dicen Christmas, cuyo significado es ‘misa de Cristo’.

Los cristianos conmemoramos el nacimiento de Jesucristo.

La Navidad es la fiesta más importante del cristianismo, junto con la Pascua de resurrección y Pentecostés.

Es una época solemne, donde reaparecen ciertos valores humanos que durante el año se mantienen bastante ocultos, como son: la solidaridad, la unión, el amor, la paz y la esperanza.

La Navidad ha sido el principal motivo de los centros comerciales para motivar a compradores a dar regalos, principalmente para fin de año alrededor del mundo.

Muchas historias navideñas recrean con esperanza relatos milagrosos.

En la actualidad la navidad sobrepasó los límites de la religión propiamente dicha y simplemente se disfruta de la reunión con sus seres queridos, el árbol navideño, los regalos y la familia reunida. Pero muchos han convertido esta fecha festiva en una reunión meramente material.

La navidad es el tiempo para expresar los sentimientos de paz, amor, sinceridad, alegría, compartir con las otras personas, de cantar y bailar, pero también de perdonar y olvidar, de reconciliación con los seres queridos y con la conciencia propia, y de visitar a quienes se quiere.

En Navidad muchos sonríen, pero también he visto a muchos llorar, porque la alegría, la risa y el despilfarro se enfrentan a la rabia y a la envidia de los que esperan que llegue diciembre para darle un abrazo a sus padres, hermanos, amigos; y compartir una mirada de esperanza, pero el resto del año viven como ermitaños.

¿Por qué esperar diciembre para mostrar nuestro afecto, amor y comprensión?

Si todos los días vivimos agradando a Dios, nuestro corazón experimentará el amor y la paz, y podremos vivir una eterna navidad.

Tú puedes vivir la navidad todos los días del año, no solo un día.

La decisión es tuya.

  
Navidad.

Tú eres aquella estrella
que brillas con luz radiante
a mi casa vienes dichosa
a iluminarnos el semblante.

Es amor, esperanza y fe
Alegría, encuentro en familia
Calor en la noche fría
Camino que se abre a mis pies

Navidad que me permites
Rodeado de amigos
Con mis padres y hermanos
Encontrar gran regocijo.

Que tú corazón hoy esté repleto
con ingredientes de navidad
como plato grande y completo
Que desbordes felicidad.

Luz de día, blanca flor  
estrella que guía mi ser
Su amor hace andar al tullido
Y al ciego hace ver

Hoy a todos mis amigos
Fuerte abrazo quiero dar
Que siempre sean bendecidos
Desde año nuevo, hasta navidad.

JoseFercho ZamPer.

Sobre lo que crees.

Lo que se puede saber de la biblia se remonta a miles de años atrás. Jesucristo es el personaje central de la historia bíblica, su vida y ...