Pensar en
la vida nos abre la posibilidad de conversación, dando como resultado algunos
de los pensamientos que se comparten aquí.
El rostro
de la persona muchas veces dice cosas, que no son propiamente las que queremos
mostrar. Esa es la realidad humana.
Es
importante llegar al silencio, el silencio habla por sí solo, debemos quitar un
poco de mente, hacerle más caso al corazón, guíate más por el corazón y menos
por la mente.
Debemos
buscar el silencio en la mente, y así obtener paz en el corazón. Cuando
aparezca la chispa primera, podré saber dónde estaba yo, o sea: dónde está el
ser; ese es mi drama.
A veces,
aunque no haya nada de contenido, la expresión de tu rostro te delata, esa
expresión es creatividad. Cuando hay alma por dentro todo es diferente, pues
ella es transparente.
Yo soy
alma, ella es quien le da forma al cuerpo.
El
silencio es la vida por dentro, es palabra verdadera, es el origen del lenguaje
del alma.
Mi alma
como el silencio solo están expuestos ante una puesta de sol, ahí es cuando
puedo saber quién soy.
Muchos
estamos viviendo sin captarlo, otros están muertos sin notarlo.
El niño
interno nunca creció, el adolescente, adolece de la infancia. Debemos ir
desnudando la vida, esa es la actitud.
Llegan
momentos en que nos encontramos solos ante lo infinito, ahí es cuando Dios
actúa.
Dios al
ver que la humanidad estaba perdida, que no tenía ninguna opción de salvación,
sintió amor de padre, y actuó como tal.
El hombre
en medio de la esclavitud con un dolor infinito en su corazón levanta su mirada
a un cielo que lo sobrepasa en inmensidad y lejanía. Entonces
Dios mismo se hace hombre por medio de su hijo Jesucristo, y viene a la tierra
a ofrecerse a sí mismo como salvador nuestro. De modo que Dios se vuelve
humano, esto a mí me interesa mucho, porque cuando Dios hace pan, desea que yo
lo coma, y él se siente feliz si yo lo hago.
Aquí se
me abre todo un mundo de amor y servicio, el hacer feliz al hermano. El
espíritu de Dios se encarna en un cuerpo humano dando origen a una historia que
excede cualquier historia.
Pero
después vienen los hombres y dicen: nosotros éramos esclavos en Egipto, pero
nos liberamos y salimos de allí, luego nos hicimos un pueblo poderoso y
seguimos conquistando la tierra prometida por Dios. Después vino uno que se
llamó el Cristo y lo colgaron en la cruz, pero dicen muchos que en ése que
fracasó estaba Dios.
Si los
"cristianos" hacemos lo mismo que el mundano, no se cómo podría Dios
hacer algo por lo que queda de planeta.
No
pretendo esconderme del mal, quiero obedecer a Jesucristo y a su palabra.
Todo el
tiempo pensé que yo trabajaba para mi jefe, ahora me doy cuenta de que mi jefe
trabaja para mí.
La ley de
Pareto, también conocida como la regla del 80/20, establece que, de forma
general y para un amplio número de fenómenos, aproximadamente el 80% de las
consecuencias proviene del 20% de las causas.
El
principio establece que el 20% de lo que se invierte es responsable del 80% de
los resultados obtenidos.
Es decir,
que la mayoría de las veces en la vida nos desgastamos mucho más de lo que
obtenemos, o malgastamos nuestros pocos recursos en cosas improductivas.
Por eso
el Señor nos dice:
"Bien,
siervo bueno y fiel. Sobre poco has sido fiel, sobre mucho te pondré.
Entra
en el gozo de tu señor ". Mateo 25:21
Amen.
Jesucristo
te ama y te bendice.
JoseFercho ZamPer
Excelente escrito amigo JoseFercho, es importante servir a Dios a través de servir al prójimo. Att. Grafimarc
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