El
sufrimiento del justo.
Hemos
estado viviendo en estos días por la gracia de Dios, debido a las dificultades
del clima e inseguridad, gracias por su compañía y oración por amor.
Que
tu amor, tu fuerza y tu espíritu dentro de nosotros nos ayude a entender y a
comprender que lo más importante es tu palabra, porque nos llena de fuerza, de
paz y ganas de vivir.
Bueno,
estamos en tiempos difíciles haciendo de la lectura del Evangelio algo muy
interesante, y eso nos ayuda a darnos cuenta de nuestra debilidad.
¿Qué
podemos decir si hablamos mucho de la palabra de Dios, pero nos comportamos
como personas mundanas, saliendo o entrando por la puerta de al lado?
En
este mundo nadie tiene aureola por muy santo que se crea, tampoco se le ponen
velas a no ser que esté en un altar, el mundo necesita gente bondadosa, que
impacte a los otros con amor, y eso solo se puede desde el amor de Jesucristo
en cada ser humano.
Está
bien compartir las convicciones más profundas, pero será mucho mejor si se
acompañan de buenas acciones con los demás. La mejor respuesta del amor al otro
es una actitud de servicio conforme al Evangelio.
Necesitamos
ver el reflejo de Dios en los creyentes, o sea, hay que intentar ser reflejo de
Dios para los demás que estén a nuestro rededor, haciendo su voluntad.
Los
seres humanos somos hechos a imagen y semejanza de Dios es decir en todos los
seres humanos hay rasgos de Dios. El libro de Job nos habla de las distintas posiciones
que asumen las personas cuando se le cuestiona su fe delante de Dios.
¿Por
qué sufren las personas que se creen buenas?
La dicha
de las personas se acaba cuando llegan los problemas.
Siempre
esperamos que Dios nos solucione los problemas en los que nosotros mismos nos
metemos, pero cuando no vemos eso, nos desesperamos y nos metemos en una
espiral de discusiones y disculpas tratando de justificar nuestro mal
comportamiento y nuestra falta de fe en Dios.
Nosotros
los humanos pecamos por acción y por omisión.
La
palabra de Dios y la ley así lo plantean.
Código
Penal. Artículo 25. Acción y omisión
La
conducta punible puede ser realizada por acción o por omisión.
Quien
tuviere el deber jurídico de impedir un resultado perteneciente a una
descripción típica y no lo llevare a cabo, estando en posibilidad de hacerlo,
quedará sujeto a la pena contemplada en la respectiva norma penal. A tal
efecto, se requiere que el agente tenga a su cargo la protección en concreto
del bien jurídico protegido, o que se le haya encomendado como garante la
vigilancia de una determinada fuente de riesgo, conforme a la Constitución o a
la ley.
La Biblia.
Proverbios
24:12
Si
dices: Mira, no sabíamos esto. ¿No lo tiene en cuenta el que sondea los
corazones? ¿No lo sabe el que guarda tu alma? ¿No dará a cada hombre según su
obra?
Santiago
1:22
Sed
hacedores de la palabra y no solamente oidores que se engañan a sí mismos.
Santiago
4:17
A
aquel, pues, que sabe hacer lo bueno y no lo hace, le es pecado.
Mateo
25:45
El
entonces les responderá, diciendo: ``En verdad os digo que en cuanto no lo
hicisteis a uno de los más pequeños de éstos, tampoco a mí lo hicisteis."
Lucas
11:42
Mas
¡ay de vosotros, fariseos!, porque pagáis el diezmo de la menta y la ruda y
toda clase de hortaliza, y sin embargo pasáis por alto la justicia y el amor de
Dios; pero esto es lo que debíais haber practicado sin descuidar lo otro.
Lucas
12:47
Y
aquel siervo que sabía la voluntad de su señor, y que no se preparó ni obró
conforme a su voluntad, recibirá muchos azotes.
Muchos
creemos tener fe y paciencia más los otros dicen, “parece que fuera un tipo muy
paciente pues le pasa de todo y nunca se queja de nada, siempre hace buena cara”
pero en realidad por dentro está el drama de la existencia humana.
La
realidad humana no es un jardín de rosas ni tampoco una tragedia, se parece más
a una tragicomedia, porque en la vida hay tiempo para reír y para llorar,
porque existe la dificultad.
Algo
que sí nos causa escozor es la dificultad o el sufrimiento que pasan aquellos
que consideramos inocentes, que es el caso de nosotros que estamos sumergidos
en ambientes espirituales o religiosos.
Desde
cuando surgió la idea de la teología de la retribución que dice “Si yo me porto
bien Dios me tiene que premiar”. Se entiende entonces que, si alguien está
viviendo un mal momento es porque le falta oración, porque está lejos del señor
o, porque está en pecado.
Otros
tienen la mala idea de que si alguien tiene privilegios en este mundo tales
como: si tú tienes billete, apellidos de renombre, le va bien en el estudio o
trabajo, eso significa que estás bien con Dios. Lo que quiere decir que la
bendición de Dios tiene que ver con las cosas que te pasan y con las cosas que
puedes tener o con los favoritismos que puedas tener de parte de otros. Si esa
es toda la experiencia espiritual que tienes, estas bastante desfasado con las escrituras
sagradas.
A
cuantos que viven una “buena vida”, se les invierte la balanza y resulta que quienes
se supone la están pasando muy bien en realidad son los más frágiles y débiles ante
la adversidad.
Uno
puede portarse muy bien y puede ser muy bueno, aun así, podría pasar por dificultades.
Y sería muy injusto pensar que las dificultades son porque usted no sea buena
persona o porque sea culpable de algo malo. Hay que tener mucho cuidado con eso
mis hermanos, pues al hecho de pasar una dificultad no le podemos agregar una
culpa, a no ser que usted se haya equivocado a propósito o, haya cometido un ilícito
para beneficiarse en algo.
Todos
somos pecadores dice la biblia, o todos nos hemos equivocado, pues nadie
llegará jamás a ser justo ante Dios por hacer lo que la ley manda. La ley
sencillamente nos muestra lo pecadores que somos. Pero Cristo sufrió nuestro
castigo y podemos ser justos ante él sin cumplir con las exigencias de la ley.
Dios nos hace justos a sus ojos cuando ponemos nuestra fe en Jesucristo. Y eso
es verdad para todo el que cree, sea quien fuere.
No
podemos jugar con la fe como jugando monopolio, no podemos sentirnos culpables
y bendecidos a la vez, o privilegiados siendo injustos.
Muchos
pierden las ganas de vivir por que en su vida hay dificultades, eso es un drama
de la existencia humana, pareciera que se van agotando las pilas y no se encuentra
el cargador por ninguna parte.
En
el mundo entero existe la desigualdad como un obrar humano y no como una manera
de obrar de Dios. Dios no es humano ni hijo de humanos para actuar así. Hasta donde
sé, los humanos nos equivocamos con frecuencia, esto es algo genético que viene
desde la concepción, pero el concepto que tengo de Dios es que él no se
equivoca ni comete errores, tampoco es injusto, Dios garantiza la competencia humana,
pero la rutina o la repetición es una de las causas de tantas equivocaciones.
Este
es un tiempo muy complicado de mucha injusticia que genera sufrimiento al inocente,
pero alabado sea el Señor que nos dio a su hijo y nos lo dejo en su palabra para
darle solución a todas estas injusticias.
Dios,
en su infinita sabiduría, conoce cada detalle del universo que ha creado. Las
estrellas, esos puntos luminosos en el cielo nocturno, también tienen sus
nombres y características únicas, aunque nosotros no tenemos ni idea de ellas. Dios
nos conoce totalmente pues, “tú formaste mis entrañas; me entretejiste en el
vientre de mi madre”. Salmo 139:13.
Entiendo
que este es un tema profundamente personal y significativo para cada uno, la fe
y la intervención divina, la conexión con Dios es diversa y personal para cada
individuo. Pero nuestros sentimientos y pensamientos sobre estos temas es
nuestra espiritualidad, lo cual es una experiencia única para cada persona.
En la
Biblia lo importante es lo que Jesucristo hizo o ganó para nosotros, el vino a ponerle
fin a nuestro sufrimiento, él quiere sanar los corazones destrozados, quiere
vendar tus heridas. Sí, él es quien sana el corazón de todos los que estemos
aquí hoy, sanar lo que hemos vivido, la injusticia, la soledad, el dolor y la depresión
generada por la injusticia humana. O sea, el viene a quitarte eso que te está
haciendo tan difícil vivir, viene a quitar del corazón eso que te está haciendo
tan difícil o insoportable la existencia. Y por supuesto el Evangelio tiene todo
que ver con esto, las escrituras están para resolver dudas y los problemas que
tienen que ver con la convivencia humana.
El cristianismo
sale del ambiente judío con una cantidad de personas que viven la ley, de ahí
vienen los problemas porque la vida no está resuelta, es una elección que
hacemos nosotros para la vida. No todas las preguntas tienen una respuesta clara
para nosotros en Cristo.
Nuestro
pasado religioso tiene un gran peso en la vida cristiana, los rituales de comida
y bebida y demás prácticas religiosas nos frenan o nos impulsan a hacer algo,
pero no necesariamente eso va en línea con Jesucristo. Básicamente el
cristianismo sale de un ambiente muy restringido y entra en un ambiente casi
desconocido en cuanto a ¿Cómo ser un cristiano de verdad?
Sabemos
que no podemos hacer cosas que pongan en riesgo a nuestros hermanos, es decir,
si hay gente que se va a confundir por lo que yo hago pues prefiero no hacerlo
y ahí empieza la actitud cristiana, que se trata de hacer lo que conviene para
todos y no solo para mí. Porque siendo libre como soy me he hecho esclavo de
todos para ganar a los más posibles.
Desde
el entorno familiar y los amigos inicia el camino para hallar la solución a
tantos males de la humanidad, cuando vemos a uno de ellos en dificultades es el
momento de actuar.
En
muchas ocasiones atacamos la fiebre o el dolor que sentimos con un acetaminofén
y con eso se pasa, pero en otras ocasiones no es suficiente, porque el dolor
viene de más adentro, de otras causas más complejas.
Lo
cierto es que cuando vemos a una persona postrada en cama con fiebre es porque
está mal, y esto es preocupante, aun así, siempre tratamos de hacer algo por
ellos. Pues Dios hizo todo por mí, entregó a su hijo como pago de eso malo que
a mí me afecta o me daña.
Para
entender la Biblia hay que quitarnos una cantidad de conceptos extraños que
tenemos sobre el tema, Dios toma la debilidad del ser humano para levantarnos. Si
esta palabra llega al corazón de cada persona que se está sintiendo mal en
algún momento, experimentará la paz de Dios y le será devuelta la salud espiritual
y física. Experimentará una recuperación del ánimo, de las ganas de vivir, de
las fuerzas, y eso es fantástico, pues es la posibilidad de convertir la
dificultad y darle sentido a la vida.
Imagínense
una religión en la que la gente no pueda buscar a Dios, la gente busca a Jesucristo
cuando se les acaban las opciones, eso es bien complicado. La responsabilidad
nos permite tomar buenas decisiones, así que dejemos de lado la culpa que nos destruye.
Hay
un tipo de felicidad que solo se descubre en las personas después de superar los
malos momentos, por la satisfacción que produce gestionar bien esos momentos, ese
es el camino de la realización personal y de la madurez para obtener luz y
poder alumbrar a los demás.
Los
enviados de Dios son aquellos que fueron elegidos por Dios para llevar a cabo
una tarea específica como proclamar la palabra de Dios a su pueblo y hacer discípulos
de Él.
¡Hombre!
El Señor te ha dado a conocer lo que es bueno, y lo que él espera de ti, y que
no es otra cosa que hacer justicia, amar la misericordia, y humillarte ante tu
Dios.
Bueno
amigos, lo cierto es que jesucristo es la respuesta a todas nuestras
necesidades. Yo mismo ando en ese camino, el de la verdad y la vida.
Deseo
que tu necesidad halle respuesta en quien todo lo puede…
Jesucristo te
ama y te bendice…
JoseFercho
ZamPer
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